Día a día, realizamos una serie de malos hábitos que pueden ser perjudiciales para nuestra salud bucal. En la gran mayoría de casos no somos conscientes, pero en realidad estamos afectando a nuestra sonrisa.
Si quieres lucir una sonrisa sana, fuerte y perfecta, es fundamental mantener una buena limpieza diaria tanto en los dientes como en las encías, además de visitar a tu clínica dental en Madrid periódicamente,
En el post de hoy, os traemos aquellos hábitos cotidianos que perjudican nuestra sonrisa a largo plazo y que podemos evitar:
Cepillarse de forma incorrecta o brusca
Es uno de los peores hábitos que pueden tener algunos de nuestros pacientes y que más influyen en su salud dental. Desafortunadamente, son pocas las personas que saben como realizar una buena técnica de cepillado: con movimientos circulares y sin aplicar mucha fuerza en el diente, ya que se puede provocar un desgaste en las piezas dentales, hipersensibilidad o retracción en las encías.
Morder y abrir objetos
Muchos de vosotros utilizáis los dientes como herramienta para morder o abrir objetos. Actos sin importancia como cortar un pedazo de hilo, morder un bolígrafo o abrir una botella con los dientes, provoca un deterioro importante en tu dentición.
Estos actos inconscientes pueden fomentar el desplazamiento de los dientes, provocar heridas e incluso en algunos casos la rotura de alguna pieza dental.
Morderte las uñas
Además de ser un gesto antihigiénico, es un hábito que puede provocar problemas en la articulación de la mandíbula, así como facilitar el desarrollo de los casos de bruxismo.
Tabaco
Aunque la gran mayoría de vosotros ya conocéis los efectos negativos que provoca el tabaco en la salud general y bucal, éste hábito fomenta la decoloración de los dientes ya que contiene nicotina, una sustancia corrosiva que va desgastando poco a poco el esmalte.
Además, produce mal aliento en el paciente, y lo más importante a tener en cuenta, cáncer oral.
Rechinar los dientes
El acto de rechinar los dientes es un trastorno conocido con el nombre de bruxismo, generalmente producido por el estrés constante que padece el paciente. Esta conducta, frecuente e involuntaria, genera dolor mandibular y desgaste en el esmalte, llegando a ocasionar fisuras dentales.
Ahora que ya conocer los daños perjudiciales de los hábitos comentados anteriormente, es el momento de empezar a cuidar tu sonrisa y mantener una buena rutina de higiene oral. Es decir, cepillar los dientes y las encías a diario y completar el cepillado con otras técnicas como el hilo dental y el enjuague bucal diario.
No olvides visitar clínica dental en madrid Bukodent una vez cada seis meses para garantizar una sonrisa sana y bonita y poder corregir a tiempo desplazamientos o deterioro en los dientes.